Las melodías –tangueras, pero que podían devenir en ska o incluso punk- y las letras transmitían diferentes sensaciones, logrando el principal cometido de una canción: emocionar. Incluso, por momentos, uno deseaba estar tomando un whisky en algún viejo burdel, mientras sonaban los acordes de Don Dardo desde algún escenario…
Para la última parte del show, se sumó una pantalla donde se transmitían imágenes de calles y barrios, autos y personas… imágenes de una ciudad gris, pero que aún conserva algún brillo en donde todos nos reconocemos. Acopladas perfectamente a las canciones, fueron el cierre ideal para un show memorable.
crónica: Andrés Moreno // Fotos: Irupé Medina
Excelentes las fotos!! Esta vez, Iru, te luciste...
ResponderEliminar....o fué un dúo que las sacó???
Gracias Bruno, son mias las fotos pero si tube una invitada especial!
ResponderEliminarmuy bueno el ciclo como siempre y vamos a tener que prepararnos para el flamenco del 19!
Saludos!
no hay videos?
ResponderEliminarNo se filmaron videos de don dardo por problemas tecnicos.
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