Energía. Es lo que se sentía cuando uno entraba a la sala, y veía a todo ese público que esperaba ansioso –entre murmullos, cánticos, y aplausos- la llegada de Eruca Sativa al escenario. Un público que llenó el auditorio en su totalidad, y que hizo sentir su calor a lo largo de todo el show.
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Energía. Es la que desplegó la banda desde que arrancó el set, con tres músicos que “la descosen” al ritmo de un rock pesado sobre el cual la voz de Lula Bertoldi -también guitarrista- suena poderosa y atractiva. Las bases de Brenda Martin (¿hace falta presentación?) y de Gabriel Pedernera son, simplemente, arrolladoras.
Eruca Sativa adelantó lo que será su primer disco, titulado “La Carne”. Entre tema y tema hubo mucha charla: desde chistes que iban y venían con el público, hasta explicar alguna letra o adelantar fechas. Las canciones fueron pasando, hasta que llegó el final del show: “Eleanor Rigby”, el cover de Los Beatles, fue la encargada de cerrar la velada.
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Energía. Tanto arriba como abajo del escenario. Energía que iba y venía por toda la sala, através del sonido y las palabras, que se sentía en cada nota y cada espacio… Energía. 
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