Ráfaga caliente del Norte

El Rock instrumental siempre nos ha llegado desde lejos. Discos de remotos rincones ingleses, experimentaciones con fríos aires nórdicos, y fusiones con las tierras y las mitologías de diversas partes del mundo; siempre como una alternativa al “otro Rock”, ese que suena en las radios y se consigue fácilmente en las bateas.



A finales de la década del 60, grandes guitarristas como Jimi Hendrix, Jimmy Page y Jeff Beck –entre otros- abrieron caminos imborrables para las futuras generaciones de “violeros”, esos que usan su instrumento como un arma para la defensa de la humanidad convirtiéndose en súper héroes de la música, transmitiendo energías y estampando su virtuosismo en pos de un Rock excelso y meticulosamente cuidado. Quizá los hijos más representativos de esa generación pionera sean Steve Vai, Joe Satriani y Eric Johnson, influencias directas para los músicos de 3 de Copas que plasmaron en un disco titulado Tributos (2000) algunos temas de éstos próceres del Rock.


3 de Copas es un trío del Rock instrumental fundado en el año 1998 en la ciudad de Jesús María. Ésta banda conformada por Ariel Vilche (guitarra), Matías Londero (bajo) y Jordan Toro (batería) ya ha recorrido importantes senderos en sus diez años de trayectoria. Algunos de los puntos más altos de su carrera tienen que ver con que en el año 2006 realizaron su primera gira por México, tocando en el festival de Villaflores, en el estado de Chiapas, y en el legendario pub Rockotitlán del Distrito Federal, además de compartir escenario junto a importantes bandas nacionales como La Renga , Viticus, Las Pelotas, Lovorne, Carina Alfie, La Mancha de Rolando, Árbol, Cielo Razzo, Rata Blanca, Los Cafres, Memphis la Blusera , León Gieco, JAF, Amparanoia, Bersuit Vergarabat y Carajo.

Esta vez a 3 de Copas le tocó hacerse cargo de las tablas del Cineclub Municipal Hugo del Carril en el ciclo Ensayo de Orquesta, un clásico de los martes. La banda comenzó a tocar a las 20:45 hs. desplegando un poderío sonoro pocas veces experimentado en el Ensayo, colmando los sentidos de un público expuesto a las provocaciones melódicas de un trío que hace de cada tema una conversación instrumental de los más diversos tonos y matices. Ariel Vilche fue el encargado, junto a su guitarra, de trasladarnos por diferentes paisajes sensoriales de la mano de solos épicos, riffs detonantes y arpegios cadenciosos con una técnica y una humildad admirables. Claro que Vilche no podría desplegar su talento sin la consolidación de una base perfecta y compacta como el cemento a cargo de Matías Londero y Jordán Toro. Londero recorría el escenario y saltaba como sintiéndose en el festival de Altamont, acompañado de la precisión rítmica del “batero” Jordán Toro.



3 de Copas es una banda que suena potente, pareja y prolija, donde los tres instrumentos van al frente en un sonido común y compacto alejado de los efectos y las prestidigitaciones digitales, sonando crudo y fuerte. Parches Yamaha tronando en la sala, guitarra Ibanez con sistema de puente Floyd Ross, y dos bajos –también- Ibanez (uno de ellos, Fretless) bastaron para sacudir la tensión de un feriado particular.


El espectáculo contó con la presentación del primer disco de estudio de 3 de Copas, "Metiendo Púa" (2005), donde la banda desarrolló un repertorio impecable de temas propios. La sorpresa sobrevino cuando los músicos interpretaron una versión en clave “rock progresivo” de un clásico del tango nacional, Adiós Nonino, del maestro Ástor Piazzolla. Sumado a esto, la banda interpretó Little Wing y Voodoo Chile en un tributo a Jimi Hendrix, los dos únicos temas cantados del repertorio ejecutado. Así, el público disfrutó de una noche cargada de sonidos.

Desde Jesús María nos visitó 3 de Copas, como un viento caliente del Norte.


Nota: Santiago Pfleiderer // Fotos: Irupé Medina